En general, la evidencia disponible demuestra de forma contundente que, en comparación con los adultos mayores menos activos, hombres y mujeres, las personas mayores físicamente activas:
- presentan menores tasas de mortalidad por todas las causas
- menores tasas de depresión;
- un mejor funcionamiento de sus sistemas cardiorrespiratório (mejora la circulación sanguínea, baja la tensión arterial) , osteomuscular (más fuerza, coordinación y equilibrio y huesos más fuertes)
- presentan una mejor composición corporal y mayor salud funcional
- un menor riesgo de caídas, mejores funciones cognitivas, y un menor riesgo de limitaciones funcionales moderadas y graves (pues como se sabe, la causa más común de la perdida de las capacidades funcionales en la persona mayor es la inactividad y la inmovilidad).
La fisioterapia se ha convertido con el transcurso de los años en un método de comprobada eficacia a la hora de prevenir enfermedades, curar o facilitar la recuperación de lesiones, aliviar dolencias o contribuir a mejorar la movilidad, agilidad, fuerza y resistencia de cualquier parte del cuerpo.
En el caso de las personas mayores, y debido al desgaste propio de la edad, la fisioterapia cobra vital importancia. A través de ella se consigue mejorar la movilidad de estas personas, mejorar su masa muscular y el equilíbrio ayudando a evitar posibles caídas o fracturas que tan peligrosas pueden resultar en estas edades.
La fisioterapia del Centro del Adulto Mayor se realiza de manera individualizada ayudando a crear seguridad en el paciente, mejorar su autonomía e independencia, para lograr una mejor salud y calidad de vida.